Conocí a José Miguel Mulet hace dos años y medio cuando tuve el honor de presentar su libro “Los Productos Naturales Vaya Timo” en la FNAC de Murcia. Desde entonces nuestros caminos se han cruzado muchas veces y creo que puedo decir, sin temor a equivocarme, que es uno de los grandes amigos que me ha dado el mundo del 2.0. En este tiempo hemos coincidido no solo en eventos científicos, donde solemos liarla, sino en todo tipo de saraos lúdico-festivos… incluso su hija y la mía son buenas amigas.
Una vez que han leído esto sé lo que se les está pasando por la cabeza. Están pensado que, con estos antecedentes y siendo tan amigos, en la reseña de “Comer sin miedo” no puedo hace otra cosa que decir que esta obra es cojonuda…. y llevan parte, solo parte, de razón.
El libro que hoy traigo a la “Estantería de Scientia” es buenísimo, tanto en la forma como en el fondo, pero les aseguro que no se lo digo porque seamos amigos sino porque lo pienso firmemente… y las cifras de venta lo demuestran. Comer sin miedo va ya por la cuarta edición. Sobran más comentarios.
La forma. Hay libros, pocos, de los que no te hace falta conocer previamente el autor para saber quien se esconde detrás de él. Comer sin miedo es uno de ellos. El estilo divertido e irónico pero siempre dotado de una extrema rigurosidad científica que emplea J.M. Mulet para desmontar todo tipo de falacias es inconfundible… y eso hace que este libro editado por Destino se devore en un pis pas. Finalmente, la excelente combinación de humor, ciencia y sentido común que emplea el autor no solo es un ejemplo magistral de divulgación científica apta para todos los públicos sino que engancha desde el principio.
El fondo. A la hora de hacer reseñas de libros cada maestrillo tiene su librillo. En mi caso no me gusta ir analizando capítulo por capítulo todo el contenido de un libro. Personalmente prefiero dar pequeñas pinceladas y que sean ustedes los que vayan descubriendo lo que se esconde detrás de cada uno de ellos… pero hoy no me voy a resistir a contarles algunas cosas que me han encantado del libro de José Miguel.
Lo primero que debo decir es que el título del libro me parece acertadísimo porque no solo refleja fielmente la idea principal del mismo sino porque es un misil en plena línea de flotación dirigido a todos aquellos que usan la demagogia, la pseudociencias, y la poca vergüenza para infundir miedos absurdos en el consumidor basándose en el gran desconocimiento que existe en la sociedad sobre aspectos nutricionales…¿se nota que esto me cabrea verdad?
Respecto al contenido debo reconocerles que hay capítulos de Comer sin miedo que no me esperaba. El primero de ellos, destinado al importantísimo papel que juega la alimentación en el desarrollo de nuestra especie, es un ejemplo. En él J.M. usa magistralmente la nutrición, la fisiología, la física y la química para explicarnos los principales fundamentos de la alimentación humana. También me ha sorprendido gratamente la parte del libro destinada a desmontar el sinsentido de muchas dietas tras las cuales se esconden verdaderos fraudes…. por no hablar del curioso mundo de las dietas basadas en creencias religiosas.
En cambio no puedo decir que el capítulo destinado a los alimentos ecológicos me haya pillado de nuevas. Como fiel seguidor de su blog lo esperaba ansioso. Sin embargo, creo que el enfoque que le ha dado J.M. Mulet al tema de los productos ecológicos es diferente al que pude leer en su primer libro… y este me ha gustado mucho más. Las últimas revisiones científicas al respecto no dejan lugar a dudas: el “alimento ecológico” es una marca comercial detrás de la cual no hay ni productos más nutritivos ni alimentos más seguros.
Decía un mítico profesor de la antigua Facultad de Químicas de la Universidad de Murcia que “un químico al que no le guste cocinar no es un buen químico porque la cocina es el más completo de los laboratorios”… y J.M. Mulet lo demuestra en el capítulo titulado “Comida tradicional: el quimicefa”. Detrás de la elaboración de cada plato hay cientos de reacciones químicas. La gran cantidad de curiosidades que van apareciendo a lo largo de este capítulo te obligan a leerlo de un tirón. No se lo pierdan.
He dejado para el final de esta reseña lo que más me ha gustado de Comer sin miedo… la contundente forma con la que José Miguel desmonta con argumentos científicos muchas de las falacias acerca de la supuesta “inseguridad alimentaria” que nos rodea y que son habitualmente empleadas por diferentes sectores relacionados con la alimentación… y es que esto me supera. Cada vez son más los sectores que, de forma deliberada, se aprovechan de la poca educación nutricional de muchos consumidores para sacar tajada económica de la peor manera posible: asustándolos.
Miedo a los aditivos, miedo a los compuestos químicos, miedo a los transgénicos… Personalmente, pienso que la labor de J.M. tirando por tierra todos estos absurdos temores no solo es acertadísima sino también muy necesaria. Desde mi punto de vista esta obra es una auténtica declaración de guerra, una forma de decir “¡¡Basta ya!!” a un gran número de mitos y leyendas que en los últimos años están haciendo mucho daño a la sociedad. Comer sin miedo es un puñetazo en la mesa. Asustar es fácil… pero con argumentos científicos también es fácil dejar en evidencia a los que asustan.
Concluyo. Si usted ha entrado en este blog y está leyendo esta reseña es porque considera importante la divulgación científica… y esa es la principal razón por la que está obligado a leer Comer sin miedo, uno de los mejores libros de divulgación que he leído. Gracias José Miguel por escribirlo… y gracias también por acordarte de Scientia en la literatura recomendada. Todo un honor, amigo.
Jose
SCIENTIA 
Ambos sois un ejemplo a seguir (que no a imitar) en muchísimos aspectos… tenemos mucha suerte los aficionados a la ciencia de teneros en activo.
Totalmente de acuerdo con el amigo vtsartas!
Mil gracias a los dos. 😉
Fantástico el libro. Después de leer el post voy a leerlo de nuevo.
Gracias a los dos por la gran labor que haceis.
Gracias!!
El libro es muy bueno. Tengo una mini-reseña preparada pero la dejo en el congelador tras leer esta tuya tan completa.
Salud
Dani, todos sabemos que todas tus reseñas son imprescindibles…tu punto de vista sobre los libros de divulgación es el más apreciado de la blogosfera.
Jose
«el “alimento ecológico” es una marca comercial detrás de la cual no hay ni productos más nutritivos ni alimentos más seguros.»
Como su propio nombre indica, los alimentos ecológicos no pretenden ser más nutritivos o más seguros, sino más respetuosos con el medio ambiente, con la biodiversidad, más concretamente.
Como comprobaras si dedicas un poco a ver la publicidad o los supuestos puntos positivos con los que se defiende o argumenta a favor de la alimentación ecológica, lo que dices no es cierto.
Si se pretende que son mas nutritivos y mas seguros por estar obtenidos mediante «procesos naturales» sea eso lo que sea. Así que independientemente de que se pretenda que son mas respetuosos con el medio ambiente, tambien se plantea que son mas nutritivos.
Pues el Consejo Regulador de Agricultura ecológica no se refiere solo al medio ambiente en su web….http://caermurcia.com/caerm/productos-ecologicos/por-que-consumirlos/
¡¡Saludos!!
Jose
Joer, he flipado con el nombre: Consejo Regulador de Agricultura Ecológico de la Región de Murcia. O sea, «ecológico» en masculino, vamos, que lo ecológico en su nombre no es la agricultura sino el propio Consejo Regulador xD
Ok, touché. Hay que reconocer que por mucho que empiecen por lo teóricamente ecológico, al final se lanzan a la piscina para a exprimir a fondo la falacia naturalista. Sin deslegitimar la crítica sobre nutrición y seguridad, que me parece válida, aún así pienso que lo principal de la etiqueta ecológica pretende ser lo del medio ambiente y la biodiversidad. De todos modos los estudios sobre este tema tampoco han encontrado que la ecológica sea mejor:
http://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S0301479712004264
Haz clic para acceder a DEFRA-Environmental%20Impacts%20of%20Food%20Production%20%20Consumption.pdf
http://scientiablog.com
Url:
http://scientiablog.com
Autor:
José Manuel López Nicolás
Categorias
Ciencia, Tecnología e Internet
Fecha de creación:
8 de febrero de 2011
Ciudad, país:
Murcia, España
Tu voto: Puntuación:5/5
Este blog participa en los Premios 20Blogs 2013 en la categoría:
Ciencia, Tecnología e Internet – 2º puesto (502 votos)
La votación ha finalizado. Los resultados oficiales se conocerán el 28 de marzo.
SCIENTIA se caracteriza por denunciar, empleando el rigor científico como arma, los engaños que se sufre el consumidor por parte de empresas que emplean el marketing pseudocientifico El blog ha conseguido que diversas multinacionales hayan tenido que cambiar sus campañas publicitarias engañosas. En otras secciones el autor divulga, usando personajes del Señor de los Anillos, sus propias publicaciones en importantes revistas científicas.Además se habla de historia de la ciencia y de otras curiosidades científicas.Premio Bitácoras 2013.
en un pis pas (con perdón, disculpe mi atrevimiento)
Mil gracias!! corregido 😉
Gracias por su deferencia.
Acerca del libro «Comer sin miedo», de J.M.Mulet, debo decir que lo compré hace una semana (es la 2ª edición). Desde entonces lo estoy leyendo con total atención. Aún voy por la página 93, en el titular «Mucha pseudociencia, poca información». Encuentro el contenido del libro muy ilustrativo.Te abre los ojos. Ya el subtítulo, «Mitos, falacias y mentiras sobre la alimentación en el siglo XXI», resulta muy aclaratorio. Hay páginas que uno relee con gusto («Placer o deleite que se experimenta con algún motivo, o se recibe de cualquier cosa». Diccionario RAE) porque desea, y necesita, retener las reflexiones, y la información, que encierran.
Salud y saludos para todos.
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Que pensais de esta noticia?
dejo el enlace: http://actualidad.rt.com/ciencias/view/121804-adiccion-sal-peligro-cerebro-cocaina
Alarmista…
¿Qué quiere decir que se compara a la sal con la cocaína? ¿Que la sal es adictiva? Pues yo les puedo asegurar que no cuesta consumir menos sal…No causa problema disminuir los gramos diarios, porque basta con comenzar por no comer alimentos procesados, precocinados ni en conserva, y darse el trabajo de cocinar en el hogar, cosa a la que se le hace el quite , por comodidad y flojera. Ya con eso, se disminuye muchísimo el consumo…pero hay que quitar el salero de la mesa.
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