Estimados lectores,  hoy les voy a hablar de tetas encapsuladas y de cosmética inteligente, una nueva moda que engloba calcetines anti olor, almohadas lifting que cuidan tu pelo y… “sujetadores inteligentes”. Para ello usaré la química, bioquímica la nanotecnología y la encapsulación molecular. 

Hace unos meses muchísimos medios de comunicación se hicieron eco de una noticia que suponía una revolución en el campo textil, la presentación en sociedad de “Firming Bra”: un sujetador que promete que sus tetas tendrán una piel más firme, suave, tersa e hidratada con tan solo llevarlo puesto, lo que permitirá a sus usuarias tener un pecho más firme y tonificado y lucir un escote más cuidado y atractivo. ¿Y como se consiguen estas maravillosas propiedades? Pues según los fabricantes de este sujetador mediante la técnica de microencapsulación molecular. Veamos a qué se refieren.

Según se puede leer en su página web, Firming Bra está compuesto de un 24% de elastano, un 76 % de poliamida y una serie de compuestos bioactivos. Analizando estos materiales entenderemos el mecanismo de actuación de este sorprendente sujetador que podría hacerles lucir unas tetas más atractivas.

Prenda con elastano

El spandex o elastano es una fibra sintética conocida por su excepcional elasticidad. Se trata de un copolímero uretano-urea que cuando se introdujo por primera vez, significó una revolución en muchos ámbitos de la industria textil. Para producir fibras de spandex se emplea una gran variedad de materias primas entre las que se encuentran prepolímeros que producen la columna vertebral de la fibra, estabilizantes que protegen la integridad del polímero, y colorantes.

Como se puede leer en el blog “Tecnología de los plásticos” para producir el elastano se emplean dos tipos de prepolímeros. Uno de ellos es un macroglicol flexible, mientras que el otro es un diisocianato rígido. El macroglicol puede ser un poliéster, poliéter, policarbonato, policaprolactona o alguna combinación de estos. Estos son polímeros de cadena larga, que tienen grupos hidroxilo (-OH) en ambos extremos. La característica importante de estas moléculas es que son largas y flexibles. Esta parte de la fibra de spandex es responsable de su característica de estiramiento.

El otro prepolímero que se utilice para producir spandex es un diisocianato polimérico. Este es un polímero de cadena más corta, que tiene un grupo isocianato (-NCO) en ambos extremos. La característica principal de esta molécula es su rigidez. En la fibra, esta molécula proporciona fuerza.

Estructura química del spandex, Fuente: http://tecnologiadelosplasticos.blogspot.com.es

Las principales propiedades del elastano son su capacidad para ser estirado sin que se rompa, el gran número de veces que puede estirarse, su rápido secado y ser un tejido muy duradero. Por esto se emplea en la elaboración de medias, leggins, calcetines, ropa interior, ropa de deporte, ropa de baño y, como vemos hoy, sujetadores inteligentes. Hay mucha gente que cree que el elastano y la Lycra® son lo mismo pero no es así. El elastano ha sido comercializado en el sector del textil desde su invención bajo diferentes nombres comerciales como Numa®, Unei®, Dorlastan® y Lycra® .. por lo que la Lycra® es un elastano con gran elasticidad, flexibilidad y ligereza pero no todos los elastanos son Lycra®.

Fibras sintéticas hechas con material de poliamida Fuente: http://poliamidaselmaterialversatil.blogspot.com.es

Pasemos ahora a analizar el segundo de los materiales que componen Firming Bra: la poliamida. Estamos hablando de un tipo de polímero que contiene enlaces de tipo amida. Las poliamidas se pueden encontrar en la naturaleza, como la lana o la seda, y también ser sintéticas, como el nailon o el Kevlar. Debido a su capacidad para formar hilos, la poliamida se utiliza en la industria textil y en la cordelería para fabricar medias, cuerdas, tejidos y otros elementos flexibles.

Llegamos a un momento clave en este post, la síntesis de la poliamida… aunque no será hasta dentro de un rato cuando les desvele porqué este momento es crucial. Uno de los procesos de formación de las poliamidas es la polimerización interfacial. En esta técnica el polímero se forma a partir de dos monómeros, un cloruro de diácido y una diamina. Debido a sus distinta solubilidad estos monómeros se encuentran en dos fases separadas con distinta polaridad.

El cloruro de diácido se sitúa en la fase orgánica y la diamina en la fase acuosa. Cuando se ponen en contacto ambas fases se produce la polimerización pero solamente en la interfase (o zona de contacto entre ambas fases) ya que ambas son inmiscibles. Esta interfase actúa como un minirreactor local que se pone en marcha cuando se unen los dos monómeros. El resto de las fase acuosa y orgánica actúa como simple reserva de monómeros para alimentar al minirreactor de la interfase. La polimerización cesa cuando todo el ácido ha reaccionado y de esta forma se sintetiza la poliamida.

Fuente: http://ingenieriatextilbuap.blogspot.com.es

Es posible que ustedes estén pensando que, por lo que les he contado hasta ahora, este sujetador no tiene nada de cosmética inteligente… y llevan razón. Tanto el elastano como las poliamidas son empleadas en la mayoría de los sujetadores por lo que no hay nada de especial. Sin embargo, lo creadores de Firming Bra han empleado en la elaboración de este supersujetador unos compuestos bioactivos de naturaleza hidrofóbica (retinol, ácido oleico, ceramidas, aloe vera y ácidos grasos) que no se encuentran en la composición de otros sujetadores y que son los presuntos responsables de las particulares propiedades de esta prenda. En la siguiente imagen pueden leer los efectos que promete Firming Bra en su web basados en estos compuestos bioactivos.

Antes de entrar a averiguar si estas estos principios activos cumplen lo que prometen, es el momento de preguntarnos cómo se introducen en la estructura de esta prenda y qué tiene que ver todo esto con la microencapsulación. ¿Se acuerdan lo que anteriormente les comenté acerca de que el proceso de síntesis de la poliamida era clave en la comprensión de este post? Atentos. Aunque la propiedad más estudiada de las poliamidas en su capacidad para ser empleadas como fibra en la elaboración de prendas textiles, poca gente sabe que las poliamidas pueden también emplearse como agentes encapsulantes… y por aquí asoma la “cosmética inteligente” del Firming Bra.

Como ya he comentado varias veces en este blog, los procesos de encapsulación fueron desarrollados por primera vez entre los años 1930 y 1940. La utilización de microcápsulas formadas por una cubierta externa que “atrapa” principios activos en su interior se suele emplear en una amplia gama de campos como la liberación controlada de sabores, colores, aromas, perfumes, fármacos, fertilizantes.

En la actualidad se emplean diferentes métodos de encapsulación dependiendo de las propiedades fisicoquímicas del agente encapsulante y la sustancia a encapsular, las aplicaciones para el material microencapsulado, el mecanismo de liberación deseado y el costo. Dentro de estos métodos de encapsulación destacan:

• los procesos físicos (secado por aspersión, extrusión y recubrimiento por aspersión);
• los procesos fisicoquímicos (coacervación simple o compleja y atrapamiento en liposomas o ciclodextrinas);
• los procesos químicos (inclusión molecular y… ¡¡la polimerización interfacial!!).

Si amigos, la polimerización interfacial empleada para sintetizar la poliamida de los sujetadores es también una buena técnica de microencapsulación que da lugar a rendimientos muy elevados. Veamos cómo lo hace. Como les he comentado, en el proceso de polimerización intervienen dos fases, una orgánica y otra acuosa. Pues bien, la cosmética inteligente consiste en introducir en la fase orgánica no sólo el monómero hidrofóbico que dará lugar a la poliamida sino toda la serie de compuestos bioactivos hidrófobos que les he mostrado anteriormente (retinol, ácido oleico, ceramidas, aloe vera y ácidos grasos). Al acabar el proceso de polimerización la poliamida actuará de cubierta de estos compuestos que quedan atrapados en su interior formando microcápsulas que son incorporadas a las fibras del tejido durante el proceso de hilado, de modo que cada filamento contiene miles de microcápsulas.

Fuente: http://ingenieriatextilbuap.blogspot.com.es

¿Y qué ocurre después? Pues que de una forma similar a la que emplea Rexona con su sistema Motion Sense, tal y como les conté en el post “¿Por qué Rexona nunca te abandona?”, a medida que las usuarias de Firming Bra van desarrollando su actividad diaria, las microcápsulas que se encuentran en el sujetador se van rompiendo por la fricción con la piel y los compuestos bioactivos se liberan de forma constante y gradual de forma que su acción fisiológica y sensorial sobre sus tetas perdure en el tiempo. En el caso de Rexona el material encapsulante eran maltodextrinas, en esta, poliamidas.

Llega el momento de hacernos la gran pregunta. ¿Cumple Firming Bra aquellas promesas que se pueden leer en su publicidad? Según la empresa existen estudios científicos que avalan que el uso prolongado durante 28 días y 8 horas al día de Firming Bra consigue que el 91% de la piel de sus tetas sea más suave, el 96% más firme, el 81% más elástica y lisa y el 76% más tonificada….y según dicen todo ello sin cremas, masajes ni ejercicio. Además promete que las propiedades de Firming Bra persisten hasta después de cien lavados.

¿Y esto es cierto? Pues en esta ocasión siento decirles que no tengo ni idea. No conozco con profundidad ni ese ni ningún otro estudio realizado con Firming Bra, así que animo a todas las usuarias de este supersujetador (si es que hay alguna entre mis lectoras) a que cuenten su experiencia en los comentarios de este post. La tecnología de liberación controlada de compuestos bioactivos está respaldada científicamente, pero otra cosa muy distinta es la efectividad de los compuestos liberados.

Proceso de liberación controlada

Además…¿cuál es el “tiempo de caducidad” de la efectividad de Firming Bra? Si se supone que los principios activos van liberándose poco a poco de las microcápsulas llegará un momento en el que dichos principios se agoten. Debido a estas incógnitas sería muy aventurado por mi parte evaluar la funcionalidad de este producto.

Si averiguo algo más sobre la efectividad de este supersujetador, en cuya elaboración se aplican disciplinas como la química, la bioquímica, la nanotecnología y la encapsulación molecular se lo contaré.

Jose